Cuando los deseos, los apegos, van cayendo, llega un momento en el que nada de lo que aparece te motiva.. Ni quieres nada, ni rechazas nada...
Ocurre entonces que el "objeto" más preciado también ha caído.. La devoción desaparece, la Verdad no es un objeto..
Y así, perdiendo todo interés por nada.. parece has perdido el interés por "Dios"..
¿Estará Dios interesado en Si Mismo?